El 23 de marzo se celebra el Día Meteorológico Mundial, y se estableció para conmemorar la puesta en marcha del Convenio para la creación de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) [3], cuyo objetivo es asegurar el bienestar, protección y seguridad de toda la humanidad.
Es una fecha relevante que tiene como objetivo crear conciencia de la importancia que tiene la meteorología y la hidrología para el equilibrio medio ambiental y todas las actividades que realiza el hombre en el planeta, así como para la continuidad de la vida tal y como se conoce hasta ahora.
El agua dulce es indispensable para la vida. De media, un ser humano no puede vivir más de tres días sin ella. El agua es fundamental para la producción de alimentos y de casi todos nuestros bienes y servicios, sin olvidar su trascendencia para el medioambiente.
El estrés hídrico, las crecidas y las sequías, así como la falta de acceso a fuentes de agua limpia, entrañan cada vez más retos a los que el mundo debe hacer frente. La mejora de los pronósticos, la vigilancia y la gestión del suministro de agua es una cuestión acuciante, y es perentorio abordar los problemas que conllevan el exceso, la escasez o la excesiva contaminación del agua.
Así pues, el tema del Día Meteorológico Mundial y del Día Mundial del Agua de 2020 es el mismo: el clima y el agua. [3] Este año se quiere poner el acento en una gestión más coordinada y sostenible del clima y el agua, porque ambos elementos están íntimamente ligados. Los dos constituyen la esencia de los objetivos mundiales en cuanto a desarrollo sostenible, cambio climático y reducción de riesgos de desastre.
Enlaces:
[1] https://www.diainternacionalde.com/ficha/dia-meteorologico-mundial
[2] http://www.lh.sld.cu/sites/www.lh.sld.cu/files/imagen/91/dia-meteorologico-mundial_02.jpg
[3] https://worldmetday.wmo.int/