La deliciosa piña está llena de fitonutrientes que funcionan tan bien como muchos medicamentos para reducir los síntomas de algunas de las enfermedades y afecciones más comunes que vemos hoy en día.
Es una fuente rica de vitamina C, por lo cual aporta antioxidantes, disminuye los resfriados, la tos, las alergias, y los síntomas de la gripe. Como antioxidante, tiene la capacidad de sintetizar colágeno, que es la proteína principal en el cuerpo responsable de mantener los órganos y vasos sanguíneos sanos, también puede ayudar con problemas de la piel.
Tiene un alto contenido en fibra, por lo cual puede reducir tu riesgo de cáncer colorrectal, además disminuye los niveles de glucosa en la sangre; mejora la fertilidad, protege de las enfermedades cardiovasculares, contra la pérdida de masa muscular, preserva la densidad mineral ósea, reduce la formación de cálculos renales, ayuda a disminuir la presión arterial alta, previene el asma, apoya a la salud mental porque produce serotonina; reduce la inflamación, incluyendo por ello la capacidad de ayudar a quienes padecen artritis y dolor en las articulaciones; mejora la digestión, puede aliviar los síntomas de colitis ulcerosa, reflujo ácido y ayuda a los procesos digestivos generales; tiene propiedades regenerativas.
Por todos sus beneficios la piña es una excelente opción en nuestra dieta y por si fuera poco, se puede utilizar en variados platos y les otorga su exquisitez, en jugos o, sencillamente, al natural, como fruta.
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